Amor son cuatro letras.
Y si nos quedamos sin ellas, nos morimos y nos vamos, y volvemos ausentes a una época más feliz que la actual, más bonita y placentera. Nos estancamos en el pasado otra vez, intentando que no sangren las heridas.
Y cae rojo sobre la hierba, impregnando el verde amarillo, color inexistente, solo patente en nuestra mentes. Reservo un hueco para ti en el pasado, mi presente ya no existe. Se convierte solo en una nada, algo que nos gustaría vivir.
Nos deja el amor y no somos nada, solamente queda fragmentado en cuatro letras, la A, la M, la O, la R... sin ellas vacío. Amor de madre, amor de padre, amor de hermana, amor de amor, hay tantos tipos de amores...
Y amor de amar, amar y después querer. Sangre de heridas y brechas abiertas por el tiempo, por el dolor, por las palabras... hay veces que el amor se convierte en odio y nuestra mente elimina los recuerdos sin querer. Maldito tiempo perdido con esa persona que nunca quise conocer. Mal-di-to-tiem-po-perdi-do-por-ti.
Ahora te dejo ahí, tirado, tirada, sobre ese césped que una vez me pareció el mío y ahora ya no es nada. Te quedas tu solo, sola para podarlo. Yo tiendo y cuelgo esas cosas que ya no me sirven de nada... esas cosas que quiero olvidar.
El amor es casi, casi, una mentira.
Pero merece la pena creérsela.